A causa de esta anécdota surgió lo de "Azúcar":
Cuando fueron a comer a un restaurante con unos amigos, el camarero le preguntó si quería café con azúcar... Y ella le dijo: chico, tú eres cubano. ¿Cómo me puedes preguntar eso? ¡Con azúcar! porque era obvio que no se podría tomar un café cubano sin azúcar .
Esa noche durante su show, para que los trompetistas puedan descansar, le contó al público la historia".. Después el público le decía "haz el cuento del azúcar"... Hasta que un día se canso y, antes que se lo pidieran salio gritando: "Azúcar"... Y ya no hizo más el cuento y se quedó diciendo azúcar».